“Sonríe, no gané…”

Un amigo (El güero, es una historia entretenida que en otra oportunidad se podría contar)) me envió un correo con el siguiente eslogan “Sonríe, no gané…” mi primera impresión fue rara que le habrá pasado, así que le envié un correo para preguntar de puro curioso no mas, y resulto que todo se trataba de las elecciones presidenciales en México (mi amigo es mexicano), me comento su parecer y me hizo pensar en la situación…

Cuando todo depende del aspecto exterior, uno se pierde mirándose en los espejos y jamás se encuentra a sí mismo. Pienso que poco a poco construimos una comprensión consciente de lo que ya sabemos al nacer, lo que nuestro ser interior quiere creer es verdad. Y piensa lo que ve a modo de visión de futuro.

Pero, sin embargo, no somos felices hasta que no podemos explicar esto con nuestras palabras. Si la culpa nunca es nuestra, no podemos aceptar esa responsabilidad. Y si no podemos aceptar la responsabilidad, siempre seremos las víctimas.

Si pudiésemos cambiar nuestra forma de pensar es muy probable que el mundo a nuestro alrededor cambiaria también. Los semejantes se atraen.

Cuando irradiamos lo que somos, cuando sólo hacemos lo que deseamos hacer, esto aparta automáticamente a quienes nada tienen que aprender de nosotros y atrae a quienes sí tienen algo que aprender y también algo que enseñarnos.

He pensado cuántas enseñanzas he dejado de aprender si hubiese pasado solo una hora con ese “Yo interior” en que nos podemos convertir. Cuanto podría aprender de ese yo interior que busca expresarse desde la eternidad para mostrarme lo que debería ser.

Mi amigo me enseño una lección, importante. Escuchar ese yo interior y descubrir al mundo a modo de queja y a modo de responsabilidad social, que todos tenemos voz bueno en su caso voto también.

Saludos güero a la distancia…